Esta tarde paseando cual
bohemio soñador por el corazón
del Perchel, buscando el tan ansiado reflejo
me encontré sin querer
con doble premio:El Reflejo y
una instantánea de antaño,de las
que te hacen ver casi en blanco y negro,pero esta vez
el protagonista era otro, el "añil".Ese blanco y añil
que tan caro se vende en esta tan noble y
real Ciudad, La ultima casa Manchega que
comparte "peligro de extinción" con ese trocito
de fachada situado en la calle Prado
( frente a Pronovias)
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